La nueva reunión de la mesa de teletrabajo celebrada el pasado martes 16 de marzo trajo pocas sorpresas.
Tras tratar los temas relativos a las actas pendientes, se solicitó a la empresa trabajar directamente con la plataforma presentada por la mayoría de la representación legal de las personas trabajadoras (RLPT), puesto que incluye más puntos y trata más apartados que la de la empresa. Ante esta solicitud, la empresa se negó alegando que era mejor con la suya y que cuando acabáramos con sus puntos podríamos ampliarla con los nuestros.
Preguntamos la empresa si iba a responder a nuestras propuestas sobre los puntos que habíamos tratado la semana pasada, para conocer el grado de acercamiento entre ambas propuestas. La empresa se ha comprometido a responder en la reunión de la semana que viene, esperemos a ver.
Poco tiempo dio para tratar muchos aspectos, apenas un par de ellos, por lo que la empresa prosiguió con el sistema de leer sus puntos y anotar nuestras aportaciones o posición sobre los mismos.
Antes de finalizar la reunión la RLPT dejó claro a la empresa que nos parece discriminatorio el excluir colectivos, o usar criterios subjetivos para permitir teletrabajar. Entendemos que el teletrabajo se debe permitir o denegar en base a criterios objetivos, basados en el puesto de trabajo y proyecto a desarrollar y nada más.
Visto lo poco que cunden las reuniones se le propuso a la empresa ampliar media hora más las mismas y hacerlas de hora y media, a lo que la empresa, en principio estaba reticente, pero finalmente accedió ampliar la próxima y posteriormente decidir el formato.