Nos llama muchísimo la atención cómo la empresa permanece con las orejeras puestas para no mirar a los lados, sin pararse a observar a las personas que aquí trabajamos y vemos cada día un trato más frío e impersonal.
Aunque se vanaglorian de lo mucho que les importa que conciliemos nuestra vida, lo cierto es que, de un día para otro, en pleno periodo estival, cuando apenas hay residencias de día para mayores disponibles, ni colegios o extraescolares programadas, en pleno incremento de las cifras de contagios, nos obligaron a retornar a las oficinas el pasado 5 de julio.
Tampoco se preocupan mucho de los motivos por los que, en ciertos clientes y proyectos concretos, el índice de bajas por ansiedad o estrés hace estragos.
Ni se han molestado en contestar cientos de solicitudes de teletrabajo, algunas entregadas a principios de julio, incumpliendo con lo que dice su propio acuerdo de Teletrabajo hecho a la carta. Esto está llevando a que algunas personas abandonen la compañía para irse a trabajar a la competencia.
Y menos aún se preocupan de cómo nos está afectando ver a nuestras compañeras y compañeros, estén o no en proyectos, cuando son convocados a una reunión “virtual” supuestamente “de trabajo” para luego, ejecutar su despido. Siendo testigos de cómo recogen sus cosas con lágrimas en los ojos, y cómo las personas de su alrededor se miran angustiados sin saber qué decir.
Parece que, a partir de 50 años, ya no les vales en Atos, y ni se toman en cuenta que si te despiden te arruinarán tu jubilación después de años dándolo todo en esta empresa.
¿Verdaderamente Atos es un “gran lugar para trabajar”?
Les es suficiente con estar una temporada machacándonos con correos para que hagamos “su encuesta” Great Place To work (que lanzarán el próximo 27 de septiembre), dado que obteniendo una alta participación quedan bien en la foto, en lugar de preocuparse realmente en los problemas del día a día que sufre la plantilla.
Como cada año, insistimos en que, aunque hay gente muy interesada y haciendo un gran trabajo con el objetivo de que esta encuesta sea algo positivo, la dirección tan solo está interesada en el porcentaje de personas que la cumplimentan, y obtener el famoso sello de cara a la galería, el contenido de la misma les importa muy poco.
Este año existe una novedad con respecto a Atos y sus encuestas, y es que, el próximo día 24 de septiembre, nos enviarán también, la Evaluación de Riesgos Psicosociales.
La diferencia es que esta evaluación, está programada por el equipo de Prevención, sus resultados deben ser analizados e implican adoptar medidas correctivas. Por lo tanto, nuestra recomendación es que, si tienes poco tiempo, dediques unos minutos a rellenar la Evaluación de Riesgos Psicosociales, que es la encuesta que vale para algo.